jueves, 12 de enero de 2012


2.1.2 En el recodo, pegado a la pared, hay algo que está vivo. La criatura es repugnante, como hecha de limo oscuro. En el lomo se alza una serie de escamas óseas, que la tambaleante luz de la linterna revela como algo parecido a dientes… Dos apéndices, semejantes a las antenas de una babosa, se alzan y se retraen, palpando el entorno. Ambos están rematados por manos humanas. Se mueven en todas direcciones, ciegos. Sin embargo,  los movimientos de la criatura son rápidos y recuerdan a los de una serpiente. Mide, quizá, tres metros y medio de largo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario